El relieve representa la cara de una cebra. Una línea discontinua define su forma desde las orejas hasta la boca. La cara, estrecha y alargada, tiene dos texturas. Las texturas representan las rayas de la cebra. Son de cartulina blanca y de plastilina roja. En la parte superior están las orejas y, en medio de ellas, un mechón. En la parte inferior está la boca. Tiene forma de arco invertido y toca la nariz. La nariz es muy alargada y, al igual que la boca, es roja y tiene textura de plastilina. Se aprecian líneas curvas a los lados de la nariz y en el testuz. Son rojas. Los ojos son azules y alargados. Hay mucha distancia entre ellos. El fondo de la composición es blanco y tiene textura de cartulina.