El relieve representa la energía del fuego. En la parte inferior y hasta la mitad de la obra, hay unos trazos de colores amarillos, rojos y naranjas. Tienen formas curvas y alargadas. Representan las llamas en movimiento.
Entre las llamas se ven trazos azules. Están extendidos de izquierda a derecha y viceversa. Representan el agua de un río en perspectiva. El río está detrás de las llamas.
La mitad superior de la composición está cubierta por trazos en tonos verdes. Representan la vegetación que crece en la ladera del río y que se extiende hacia la montaña.